Su impresionante cosecha de ascensos luego de haber tocado fondo en 2003, al recalar en la Liga Tucumana, así lo imponía: San Martín de Tucumán vuelve a ser de Primera, después de ascender al Argentino B en 2004, alcanzar el Argentino A en 2005, llegar a la Primera B Nacional en 2006 y meterse entre los 20 mejores equipos del país con el empate conseguido esta noche en La Paternal, ante Chacarita.Una verdadera hazaña del Santo tucumano, gestada a partir de un equipo que Carlos Roldán (DT desde el Argentino B) armó para ganar jugando al fútbol desde la primera fecha, lejos de los atajos de la mezquindad y la especulación. Porque en el Ascenso no sólo se triunfa con pierna fuerte, como reza alguna máxima que sobrevuela históricamente las canchas argentinas. También se asciende con buen juego.
Aplausos para los refuerzos que se sumaron a un plantel que venía de zafar del descenso en la 2006/07: Luciano Krikorian, Ramiro Leone, Germán Noce, Diego Romano, Gustavo Ibáñez y Mariano Campodónico, el goleador que San Martín rescató tras descender con Chicago (antes había ascendido con Belgrano), y que marcó un doblete en dos minutos para que toda La Ciudadela delire a 1.200 kilómetros de distancia.
Por tercera vez en sus casi 100 años de vida el Santo llega a la máxima categoría. Volverán las tardes en el Monumental y en la Bombonera, ese estadio en donde alguna vez le hizo 6 a Boca...
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