La tapa de Racing 0 - River 3 en la gran noche de Funes Mori, y el ascenso de Almirante Brown a la B Nacional

Así son las paternidades. Tan inexplicables como el 3-0 visitante que indicaba el tablero a los 23 minutos del primer tiempo, después de que Racing desperdiciara tres situaciones clarísimas de gol. Pero claro, los de Russo se regalaron en defensa ante un River que ya perdió la inocencia ofensiva: si le das tantas facilidades, ahora te puede pintar la cara. Ahí radica la mayor virtud de Angel Cappa. Su tiki tiki no sólo es darle la pelota a un compañero. También es generar confianza en sus jugadores, animarse a sumar gente en ataque, soltar a los laterales como dos extremos más. Tal vez eso ayude a explicar cómo un delantero novato como Funes Mori rompió una sequía de 13 juegos sin goles con tres gritos en 23 minutos. Así, River estiró a ¡47 partidos! la diferencia con la Academia en el historial más desparejo entre equipos grandes. Cosas de paternidades, vio. O de abuelazgos.